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ULTIMO MOMENTO

CAMINO A LA FINAL

Desde el doblete de Teófilo Gutiérrez ante El Porvenir hasta el último tanto oficial de Juan Román Riquelme frente a Deportivo Merlo, un camino con más luces que sombras.




No fueron caminos de rosas los de Boca y Racing en la Copa Argentina. La paridad en la que está inmerso el fútbol de nuestro país los obligó a transpirar más de lo imaginado para llegar al encuentro decisivo que se viene el próximo miércoles desde las 20:30 en el estadio San Juan del Bicentenario.

Por grandeza, estirpe, experiencia para atravesar momentos límite y hasta algo de suerte, superaron una y cada una de las fases en las que intervinieron y tendrán la posibilidad de enfrentarse para definir al campeón de la primera edición del torneo federal. Un repaso cargado de emociones y vivencias que sólo la Copa Argentina puede ofrecer.

Con la confianza por las nubes por el Apertura que acababa de lograr, Boca volvía a la actividad oficial en 2012 centrado en tres frentes: la Copa Libertadores, el Torneo Clausura y la Copa Argentina. La primera prueba llegaba en el torneo federal, y nada menos que ante Santamarina, un equipo del Argentino A que viajó a Salta para vivir la alegría más grande de su historia. Pudo haber dado el batacazo el conjunto de Ruben Forestello, pero los penales empezaron a darle un guiño a Boca, que pasó y debió visitar San Juan para enfrentar a Central Córdoba de Rosario. Nicolás Blandi y Sergio Araujo hicieron fácil lo que se había complicado más de la cuenta, y el equipo de Julio Falcioni daba un nuevo paso adelante en la Copa Argentina.

A continuación, llegó el turno de Olimpo en Catamarca y también, la increíble tanda de penales que sólo pudo terminarse cuando Martín Rolle falló y Pablo Mouche, autor de un tanto en los 90 minutos, convirtió el suyo. Fue 11–10 y retorno a San Juan para verse las caras con Rosario Central, un grande del Interior que puso en aprietos a Boca al ponerse 1 a 0 y tener a su disposición un penal que Sebastián Sosa le tapó a Javier Toledo. Al equipo de La Ribera le dieron otra vida y no perdonó: empató Blandi a poco del final y la serie desde los doce pasos le volvió a resultar favorable. Idéntica definición se dio ante el complicado Deportivo Merlo en Semifinales. Luego de que Juan Román Riquelme marcara su último gol oficial con la camiseta de Boca, Alejandro Friedrich empató sobre el epílogo del encuentro. A penales, otra vez. Tranquilizó a todo un estadio Román con su ejecución y el pase al partido decisivo pudo ser posible con la definición de Matías Caruzzo. El triunfo permitía conocer al primer finalista de la Copa Argentina.

La victoria de Racing ante El Porvenir debe haber quedado demasiado lejos en la memoria de los hinchas académicos. Allá por noviembre de 2011, el técnico era Diego Simeone y la principal figura seguía siendo Teófilo Gutiérrez, protagonista de la noche con un doblete que permitió el triunfo en San Juan. El equipo de la C vivía un acontecimiento histórico pero poco podía hacer para impedir el triunfo del equipo de Avellaneda, que seguía su camino en los 16avos. de final enfrentando a Patronato de Paraná, en Salta. Emergieron en el norte argentino las figuras de Luis Fariña, autor de dos goles, y de Lucas Licht, quien marcó uno de los tantos más lindos del torneo con un zurdazo que recorrió la mitad del campo de juego hasta terminar dentro del arco defendido por Sebastián Bértoli. Hasta allí, dos de dos para el equipo que ya no dirigía Simeone y sí Claudio Ubeda.

La siempre calurosa provincia de Chaco cobijó a Racing en los Octavos de Final, instancia en la que hubo enfrentamiento entre la Academia y Sarmiento de Resistencia. A estadio lleno – no era para menos - aparecieron Giovanni Moreno y Lucas Castro para llevarse el triunfo y lograr el pasaje a Cuartos. Luis Zubeldía empezó a ver a la Copa como un objetivo potable, puso titulares frente a Atlético Tucumán, recibió la increíble colaboración de Deivis Barone y el equipo de Avellaneda se ganó el derecho a jugar frente a River para así, volver a vivir el clásico más añejo del fútbol argentino. Un partido esperado pero poco atractivo en los 90 minutos que se definió en los penales luego de que Sebastián Saja se luciera ante Luis Vila. Cuando todos esperaban la vuelta del Superclásico, Racing imponía su grandeza y volvía a decir presente en una Final.

Boca – Racing, Racing – Boca o como quieran llamarlo. Recorrieron cinco fases de la Copa Argentina, superaron con suspenso cada una de ellas y tienen motivos de sobra para ilusionarse con llevarse el campeonato. Un millón y medio de pesos para sus arcas, el pasaje directo para la Copa Sudamericana y lo más importante: la gloria.


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