Además, se refirió a los actos de indisciplina del pasado: "Esas cosas me sirvieron para madurar. Fue una pelotudez".
Mejor tarde que nunca dice una vieja frase.
"Nos faltan jugadores", había señalado Diego Cocca, que ahora ya tiene a uno más. Carlos Núñez, que viene a préstamo de Peñarol, no ve la hora de sumarse al plantel de Racing. "Llego a un muy buen equipo, que tiene las cosas claras y un estilo muy dinámico. Estoy esperando poder encontrarme con mis compañeros, entrenar y ya ponerme a disposición del técnico", expresó el uruguayo, ansioso, antes de pasar por la revisión médica y de firmar a préstamo por un año, con una opción de 4.000.000 de dólares.
"Me gusta jugar por todo el frente de ataque. Tanto por las bandas como por el medio. Vengo a cumplir y a jugar donde el entrenador desee", se describió el delantero, que también manifestó que "ya tenía todo arreglado con Colón" antes de que apareciera la Academia en la negociación.
Además, no se olvidó de su paso por el fútbol de Uruguay y se refirió en TyC Sports a la poca continuidad que tuvo durante el último tiempo: "En Peñarol tenía que pagar mucho derecho de piso. Había muchos jugadores con mucha experiencia. No tuve demasiado ritmo y sufrí una lesión de la que me costó recuperarme".
Si embargo, lo que quizás más lo alejó de la titularidad en el fútbol uruguayo fue su indisciplina. En el 2013, en plena recuperación de una lesión, fue descubierto en un boliche junto a dos compañeros, por lo cual fue marginado durante un tiempo del plantel. "Me siento bien hoy, esas cosas sirvieron para madurar. Eso fue una pelotudez. Desde ese momento soy otra persona, ya cambié algunas cosas. Eso quedó en el pasado", se arrepintió Discoteca, como lo apodaban sus compañeros.
"Nos faltan jugadores", había señalado Diego Cocca, que ahora ya tiene a uno más. Carlos Núñez, que viene a préstamo de Peñarol, no ve la hora de sumarse al plantel de Racing. "Llego a un muy buen equipo, que tiene las cosas claras y un estilo muy dinámico. Estoy esperando poder encontrarme con mis compañeros, entrenar y ya ponerme a disposición del técnico", expresó el uruguayo, ansioso, antes de pasar por la revisión médica y de firmar a préstamo por un año, con una opción de 4.000.000 de dólares.
"Me gusta jugar por todo el frente de ataque. Tanto por las bandas como por el medio. Vengo a cumplir y a jugar donde el entrenador desee", se describió el delantero, que también manifestó que "ya tenía todo arreglado con Colón" antes de que apareciera la Academia en la negociación.
Además, no se olvidó de su paso por el fútbol de Uruguay y se refirió en TyC Sports a la poca continuidad que tuvo durante el último tiempo: "En Peñarol tenía que pagar mucho derecho de piso. Había muchos jugadores con mucha experiencia. No tuve demasiado ritmo y sufrí una lesión de la que me costó recuperarme".
Si embargo, lo que quizás más lo alejó de la titularidad en el fútbol uruguayo fue su indisciplina. En el 2013, en plena recuperación de una lesión, fue descubierto en un boliche junto a dos compañeros, por lo cual fue marginado durante un tiempo del plantel. "Me siento bien hoy, esas cosas sirvieron para madurar. Eso fue una pelotudez. Desde ese momento soy otra persona, ya cambié algunas cosas. Eso quedó en el pasado", se arrepintió Discoteca, como lo apodaban sus compañeros.
TRANSPIRAMOS EL MANTO, VOLVIMOS A CREER EN EL FUTBOL